Ayuno intermitente

El ayuno intermitente o ayuno a intervalos es una tendencia que se está volviendo muy popular, especialmente entre las personas que desean perder peso. ¿Pero qué es el ayuno intermitente? ¿Es realmente efectivo? ¿Tiene riesgos? ¿Cuáles son sus beneficios?

A lo largo de este artículo responderemos a todas estas preguntas de un modo claro para que al terminar de leerlo no te haya quedado ninguna duda al respecto.

¿Qué es el ayuno intermitente?

 

Como su nombre lo indica claramente, el ayuno intermitente es un método de alimentación que se divide en etapas en las que se ayuna y se come. Técnicamente no se trata de una dieta sino de un modo programado de alimentarse en el que no has de centrarte tanto en la cantidad y calidad de la comida sino en el cuándo la vas a comer.

Existen muchos métodos diferentes de ayuno intermitente. Los más practicados son los siguientes:

  • El ayuno de 12 horas.
  • El ayuno de 16 horas.
  • El ayuno de 24 horas.

Si analizamos estas opciones, el ayuno más sencillo de llevar a cabo es el de las 12 horas, pues puede incluir las horas nocturnas de sueño y ser extendido hasta la media mañana. 

Cabe decir que en todos los ayunos a intervalos se permite la ingesta de bebidas sin calorías para calmar el apetito.

Aprovechamos para recomendarte el estupendo blog Tu Equilibrio y Bienestar, en el que podrás encontrar consejos y cuidados para la salud escritos por profesionales sanitarios (médicos, farmacéuticos, etc.) Además, encontrarás consejos aplicados a casos reales de pacientes.

¿Cómo afecta al cuerpo el ayuno intermitente?

 

El ayuno intermitente no solo consiste en disminuir las calorías que se ingieren sino que además hace que las hormonas puedan hacer un uso mucho más efectivo de las reservas de grasa corporal.

Algunos estudios han demostrado que el ayuno a intervalos puede:

  • Mejorar la resistencia a la insulina.
  • Combatir la obesidad.
  • Disminuir las inflamaciones que se relacionan con el sobrepeso.

¿El ayuno intermitente es bueno para adelgazar?

 

Indudablemente, si comes menos calorías perderás peso. Salvo que en los periodos en los que sí puedes comer, ingieras más calorías de las que tu cuerpo necesita. Entonces no solo no adelgazarás sino que engordarás

Por el contrario, si el ayuno intermitente se hace correctamente y se combina con el ejercicio adecuado, tu cuerpo podrá aprender a procesar de forma más eficiente los alimentos que consumas.

Hay que tener presente que aquellos que tengan problemas de salud tales como diabetes, enfermedades cardiovasculares, algún tipo de cáncer o tensión alta han de consultar con su médico o nutricionista los riesgos aparejados al ayuno intermitente en su caso.

Asimismo, han de consultar con un profesional los menores de edad, las mujeres embarazadas o que dan el pecho, los ancianos y las personas que han sufrido algún tipo de trastorno en su alimentación. 

¿Qué hacer cuando tengas hambre?

 

Es común que aquellos que se inician en el ayuno intermitente se quejen de ataques de hambre e incluso de estados de cansancio anormales. Esto cobra todo el sentido porque se están saltando comidas. Otras personas dicen que con el paso de dos o tres días el hambre desaparece.

El caso es que si tienes un ataque de hambre desmedido, lo que puedes hacer es beber café o té con edulcorantes. Son parches ideales que te ayudarán a llegar más fácilmente al periodo de comida.

Otro truco es no hacer caso al hambre y salir a hacer ejercicio o buscar un entretenimiento que permita pasar las horas sin centrarse en el estómago.

Si quieres obtener buenos resultados tanto con el ayuno intermitente como con cualquier dieta de adelgazamiento has de hacerlo de forma equilibrada y saludable. Come alimentos ricos en fibra (legumbres, frutas, cereales, verduras), alimentos ricos en proteínas de calidad (pescado, huevos, soja y legumbres) y grasas saludables (aceites vegetales, semillas y frutos secos). Y no olvides beber mucha agua para no deshidratarte.

Y si quieres adelgazar, el descanso es sumamente importante, ya que la falta de sueño puede causar un aumento de peso.

En definitiva, el ayuno intermitente no está pensado para todo el mundo, sin embargo puede ser un gran aliado a la hora de perder grasa corporal. No se trata de dejar de comer, tampoco puede llevarse a cabo de forma continuada y es esencial acompañarlo siempre con ejercicio y una dieta equilibrada.