Foto de la receta

La focaccia o fugasa es tradicional de la cocina italiana y se trata de una suerte de pan plano cubierto con hierbas y otros alimentos sabrosos. Está  muy relacionada con la pizza tradicional.

Se piensa que esta receta proviene de los antiguos griegos o de los etruscos. En todo caso se trata de un manjar de la gastronomía de Liguria, también llamada fugàssa en ligur.

La masa de panadería aporta hidratos de carbono de absorción lenta y con ácidos grasos monoinsaturados y vitamina E porque se enriquece con aceite de oliva virgen.

La focaccia es perfecta para preparar degustar sola o preparar bocadillos.

Focaccia o fugassa

Ingredientes

  • 500 g harina de fuerza
  • 400 g agua
  • 25 g aceite de oliva virgen
  • 10 g sal
  • 3 g levadura fresca de panadería
  • Aceite de oliva virgen
  • Sal gruesa y romero fresco
Dificultad: Media

Modo de preparación de la focaccia o fugassa

  • Mezcla en un cuenco la harina, 25 g de aceite y la sal. Reserva la levadura pesada.
  • Añade parte del agua tibia para conseguir una masa poco pegajosa. Cuando esté incorporada vacía el cuenco en la mesada y amasa durante unos 10 minutos.
  • Cuando esté bien amasada, estira y haz unos huecos «pinchando» con los dedos. Añade parte del agua y sigue «pinchando» la masa con los dedos para que el agua se incorpore un poco.
  • A partir de aquí debes seguir amasando, pero no plegando y girando la masa (como antes) sino levantándola de la mesa para golpearla de forma repetida. Cuando veas que la masa ya ha incorporado el agua, ve incorporando más.
  • Desmenuza la levadura fresca sobre la masa con la última cantidad de agua que añadas y amasa unos minutos más. Conseguirás una masa muy fina que hay que mover aprisa para que no se pegue.
  • Bolea y guarda en un recipiente engrasado y tapado durante 20 ó 24 horas en el frigorífico.
  • Pasado el reposo en frío verás que apenas ha aumentado su volumen. Deja que doble su volumen fuera del frigorífico.
  • Precalienta el horno a 250º C
  • Vuelca sobre la mesa enharinada y estira suavemente para conseguir colocar la masa en un papel de horno que ocupe toda la bandeja.
  • Rocía con aceite generosamente y marca con los dedos para que el aceite se reparta de manera uniforme. Aromatiza con romero fresco la superficie y sal gruesa. Reposa la masa lista durante 1½ h hasta que casi doble el volumen.
  • Hornea a 230º C durante 25 o 30 minutos hasta que quede bien dorada pero no oscura ni seca.
  • Deja enfriar sobre una rejilla.

¿Cómo prefieres disfrutar tú de esta delicia llamada focaccia o fugassa? ¿Sola o rellena a modo de bocadillo?