Albóndigas con tomate y frutos secos

Las albóndigas con tomate y frutos secos, tales como almendras y piñones, resultan deliciosas cuando se necesita un suplemento energético por delgadez. Adecuadas también para conseguir un pequeño aporte de calcio.

Este 2º plato aporta proteínas de elevado valor biológico, ácidos grasos omega 6, vitamina C y hierro.

Puedes preparar un menú equilibrado sirviendo las albóndigas con frutos secos después de un primer plato de humus de garbanzos y un cítrico o un kiwi, como postre, para absorber la mayor cantidad de hierro posible.

Receta de albóndigas con tomate y frutos secos

• Para preparar rápidamente unas deliciosas albóndigas con frutos secos mezcla, en un cuenco la carne picada, los huevos, 1 cucharada de almendra molida y otra de piñones u otro fruto seco.
• Aromatiza con hierbas aromáticas como perejil, orégano, albahaca, pimienta molida, etc. Puedes corregir la textura de la mezcla con un poco de pan rallado.
• Forma las albóndigas tomando la medida con una cucharilla y dándoles forma con las palmas de las manos, apretadas, pero no perfectas.
• Ve colocando las albóndigas crudas sobre un plato engrasado para luego deslizarlas sobre la sartén sin dificultad.
• Fríe, en poco aceite, con los dientes de ajo en la sartén. Dales la vuelta a los dos minutos con la ayuda de una cucharilla de mango largo.
• Una vez doradas las albóndigas, añade un vaso y medio de tomate triturado.
• Continua la cocción lentamente hasta que el tomate reduzca y se retire con facilidad del fondo de la sartén, necesitará unos 20 minutos.
• Con el poco aceite que hay en la sartén (si lo hay en exceso se puede eliminar una parte, antes de añadir la salsa, con la ayuda de la tapa de la sartén) dará un sabor perfecto a la salsa.

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