Patatas gratinadas con jamón: un manjar para toda la familia

No hay mejor manera de dar vida a un plato de patatas gratinadas que con un buen jamón ibérico, ¿verdad?

Si bien puedes utilizar cualquier tipo de patatas, nuestra sugerencia es que uses la variedad Kennebec. Las Kennebec son patatas aptas para casi cualquier tipo de comida. Se destacan por su gran tamaño y su intenso y agradable sabor.

Asimismo, uno de los jamones más recomendados para este tipo de plato es el de El Pozo. La razón la encontramos en su sabor incomparable debido a que los productores crían su propia ganadería alimentada con piensos exclusivos.

Antes de poner manos a la obra has de tener en cuenta que el jamón Ibérico proporciona proteínas, vitaminas B1, B6, B12 y ácido fólico. Todas ellas muy necesarias para el buen funcionamiento de nuestro cerebro. El jamón ibérico también es rico en minerales tales como el calcio, hierro, cobre, magnesio, zinc, selenio y fósforo, y en vitamina E (antioxidante).

Valores nutricionales de 100 grs de jamón ibérico:

  • Kcal: 375
  • Proteínas: 43,2
  • Grasas: 22,4
  • Sodio: 1100 mg
  • Potasio: 153 mg
  • Fósforo: 157,5 mg
  • Magnesio: 1,57
  • Calcio: 27,08

Ingredientes necesarios

  • 4 ó 5 patatas.
  • Sal a gusto.
  • Pimienta a gusto.
  • 1 diente de ajo.
  • 1 chorrito de aceite de oliva.
  • 200 ml de nata para cocinar.
  • 1 huevo.
  • Nuez moscada recién molida a gusto.
  • Panceta ibérica.
  • Jamón ibérico.
  • 1 ramita de romero.

Utensilios necesarios

  • 1 pelapapas o cuchillo.
  • 1 molde para horno.
  • 1 pincel de cocina.
  • 1 vaso batidor.
  • Varillas para batir.

Preparación de las patatas gratinadas paso a paso

  • Pela las patatas y lávalas convenientemente debajo del grifo.
  • Corta las patatas bien finas. Si es posible hazlo con una mandolina y si no tienes una, no te preocupes, también puedes cortarlas a mano, eso sí con toda tu paciencia para que queden todas aproximadamente del mismo grosor.
  • Salpimienta las patatas a gusto y mézclalas con las manos para emparejar la condimentación.
  • Para no pasarte con el sabor a ajo y simplemente aportarle una pizca de sabor al plato, unta el molde en el que vas a cocinar las patatas con el ajo previamente triturado.
  • Ahora echa un chorrito de aceite de oliva en el molde y píntalo todo con un pincel de cocina.
  • Llega el momento de colocar cuidadosamente las patatas bien distribuidas dentro del molde.

Salsa para patatas gratinadas con jamón ibérico

  • Echa 200 ml de nata para cocinar en un vaso batidor.
  • Añade 1 huevo a la nata.
  • Bate la preparación con energía utilizando las varillas.
  • Añade nuez moscada (si es posible recién molida) a tu gusto.
  • Añade sal y pimienta a tu gusto.
  • Bate la mezcla hasta que quede homogénea y échala por encima de las patatas, repartiéndola de forma proporcional por todo el molde.

¡Al horno!

  • Con el horno precalentado a 200º, cocina la preparación con aire por arriba y por abajo durante 45 minutos.
  • Cuando falten solo 5 minutos para terminar la cocción, añade la panceta ibérica en láminas muy muy finas. Verás que con el mismo calor se comenzarán a derretir.
  • Cubre toda la preparación con queso gruyere rallado.
  • Sube el horno a 250º y pon la opción gratinador.
  • Hornea durante 5 minutos.
  • Déjalo enfriar durante 5 minutos más.
  • Adorna este manjar con un buen jamón ibérico y 1 ramita de romero.

Solo te queda disfrutar junto a tu familia de estas maravillosas patatas gratinadas con jamón ibérico y volver a contarnos qué tal te ha salido la receta.