Un desorden de caracter autosómico dominante del metabolismo de las lipoproteínas caracterizado por unos triglicéridos y VLDL elevados, lo que ocasiona una hiperlipoproteinemia de tipo IV.
Un desorden de caracter autosómico dominante del metabolismo de las lipoproteínas caracterizado por unos triglicéridos y VLDL elevados, lo que ocasiona una hiperlipoproteinemia de tipo IV.